Harry Potter and the Goblet of Fire
- Luis Hernández
- 4 ago 2016
- 2 Min. de lectura
9/10
"Harry Potter and the Goblet of Fire" es una película de 2005, dirigida por Mike Newell y estelarizada por Daniel Radcliffe, Rupert Grint, Emma Watson, Ralph Fiennes y Michael Gambon.
La historia comienza cuando el grupo de amigos disfruta del campeonato mundial de Quidditch, pero la celebración se ve interrumpida por los seguidores del Señor Tenebroso.
Logran escapar y es hora de comenzar el cuarto año de Harry Potter en Hogwarts, y esta ocasión, la escuela será sede de un importante torneo de magos jóvenes, "La copa de los tres magos".
Escuelas vienen para la competencia y todo está listo para que sólo los alumnos con 17 años pongan sus nombres y el Cáliz de Fuego los escoja, pero todo el mundo queda desconcertado cuando Harry de 14 años queda seleccionado.
Ahora Potter tendrá que ingresar a este arriesgado torneo y poner a prueba todas sus habilidades.
Por desgracia, tendrá que poner atención a todo lo que lo rodea, pues el regreso de Lord Voldemort parece cada vez más palpable.
Una entrega muy divertida.
La primer (y única) incursión del director Mike Newell le regresa a la saga un poco de los colores que Cuarón le quitó, pero curiosamente toca temas mucho más mórbidos.
Esta vez, la estructura de Steve Kloves hizo una historia mucho más entretenida que logra atrapar al público incluso cuando no está pasando algo demasiado relevante en pantalla, pues es la primera vez que todo el año escolar de Harry es verdaderamente interesante en el guión, sin necesidad de un villano forzoso toda la película, pues las pruebas que tienen que superar los concursantes se encargan de traer la energía de esta cinta.
Newell supo entregar muy bien la primera batalla de varitas de la saga, haciéndola muy atractiva visualmente y el manejo de cámaras es atrapante.
Durante mucho tiempo, este filme fue mi favorito personal de la franquicia.
Muy emocionante y divertida pero aún así se encarga de traer escenas emotivas y profundas.
Un punto un poco extraño es cómo dirigió Mike Newell al actor Michael Gambon, pues su personaje es muy sereno y reflexivo en las entregas anteriores, pero esta vez se le trató como un personaje enérgico y un tanto agresivo, lo cual puede incomodar a muchos seguidores.
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